Tuesday, January 22, 2013

Mix-it-Up

Un día de los años ´90 llegó a mis manos un CD que cambiaría determinante la forma en que seguiría percibiendo el mundo.
 
El álbum en cuestión era "Sahara" de The Rippongtons. En aquellos previos al advenimiento masivo del internet fué como descubrir la piedra Rosetta por accidente y quizá para cualquier otro mas educado pudiera parecer un paso intrascendental; para mí, un completo palurdo en cuestiones músico-literarias fué como descubrir un alfabeto oculto.
 
Aquella música sin vocalista era audáz, alegre, compleja y completamente diferente a lo que hasta entonces tenía a mi alcance. Difícilmente podía concebir aquel tipo de música sin vocalista (una muestra humilde pero efectiva de como se puede echar a perder la apreciación de la gente en los medios).
 
Incluso la portada escapaba a todos los cánones hasta entonces entendidos por mi.
 
El CD no era mío pero pude grabarlo sobre un cassette de música ranchera que encontré por la casa. Lo reetiqueté y lo marqué con un brillante marcador negro.
 
Y con la llegada del CD, llegó la curiosidad de donde había venido y fué que por primera vez presté atención a los Mixup y sus cabinas. Allí se encontraba todo lo que se salía de la regla, allí llegaban discos importados de lejanos lugares del mundo (luego supe que todo lo traían de USA).
 
Poco a poco fuí comprendiendo que aquellos artículos raros también contenían otras diferencias inherentes a la época:
 
Se podía decir por ejemplo; que un CD de importación, salvo honrosas excepciones, siempre sonaba mejor que uno nacional. Sin embargo su precio siempre se elevaba hasta la estratósfera para mi economía, eso entraban en la categoría de los B´s: B54, B57, B72. Precios según estuviera el dólar.
 
A golpe de muchos ahorros pude ir adquiriendo alguno que otro disco imprescindible, el hecho de ir adquiriéndolos con su etiqueta de importación me daba una sensación de triunfo y se volvió un hábito de muchos años estar visitando aquellas tiendas en busca de novedades. Muchas cosas que conozco hoy en día las encontré allí.
 
En aquellos días también, viajar hasta Perisur o Satélite era como viajar a Sudán o Chad, pero el viaje bien valía la pena porque eran las mas grandes.
 
Eventualmente, como todos sabemos, el desfile de formas y sitios de descarga se encargó de matarlo todo lentamente. Casi todos los Mixup desensablaron sus cabinas y han quitado muchísimos albumes de su repertorio "especial". Bueno, eso fué hasta hace unos años que fuí a checar; hoy creo ya no han de manejar CDs para importar a pedido del cliente.
 
No tengo mejores palabras para describirlo que el tweet de un locutor: "Hoy en día ir a un Mixup causa la misma emoción que ir al dentista".
 
Pero tampoco creo que estos tiempos sean peores: se pueden conocer grandes cosas que años antes hubiera sido prácticamente imposible. A veces extraño tener un CD nuevo con su booklet, pero el espacio ya no me lo permite, así que seguirán siendo digitales (al menos la mayoría).
 
Respecto a "Sahara", con los años y después de tantas vueltas debo decir que no tengo el CD original (quizá por nostalgia valdría la pena) ni resulta tan brillante como resultó en un principio. No es el mejor de la banda y el smooth jazz ni siquiera es considerado jazz por los "verdaderos" jazzistas.
 
Temo que en eso estoy en parte de acuerdo y quizá es un jazz de media categoría, pero lo que no puedo negar es que fué de una manera muy "discreta" un parteaguas en lo que desde entonces he venido descubriendo.

0 comments: